Fecha de publicación: 11-01-2018
Aunque para muchas personas el peso corporal no es más que una carga, para muchas otras es la herramienta idónea para ponerse en forma; he allí la esencia del TRX. En esta innovadora disciplina de entrenamiento apta para atletas de alto rendimiento, personas de la tercera edad o aquellas que estén en fase de rehabilitación, se trabaja con el propio peso corporal.
De entrada consideramos importante aclarar que este tipo de acondicionamiento físico no se llama realmente “TRX”, puesto que, ese es solo el nombre de la marca que patentaron los creadores de esta metodología de ejercicios.
A este tipo de entrenamiento se le conoce con el nombre de “Suspensión Training” es decir, “entrenamiento de suspensión”, el cual consiste en una rutina con poleas donde el cuerpo se hallará en cierta inestabilidad, puesto que las manos o los pies del usuario se encuentran generalmente sostenidos por un solo punto de anclaje, mientras que el extremo opuesto del cuerpo está en contacto con el suelo. Como estás cuerdas pueden utilizarse tanto es exteriores como en interiores, se pueden anclar en un árbol, en una puerta o cualquier otro elemento que sirva de soporte.
El TRX está concebido como un acondicionamiento físico funcional y multidimensional donde se “juega” de manera coordinada con el propio peso corporal y la fuerza de la gravedad para lograr que el cuerpo logre altos niveles de flexibilidad, estabilidad, fuerza y equilibrio.
Este ejercicio no requiere una forma física previa, ya que hay sesiones diseñadas para todo tipo de niveles. Además resulta una buena alternativa para aquellos que quieren trabajar únicamente su potencia muscular, pero también para los que desean combinar fuerza con ejercicios aeróbicos como correr, nadar o patinar.
Lo esencial de la actividad física con TRX es la realización de los llamados ejercicios funcionales. A diferencia de otro tipo de trabajo, como los ejercicios con peso, que se centran en una zona concreta, los ejercicios de TRX se caracterizan por un entrenamiento natural en el que se ejercitan todos los grupos de músculos. Con TRX se trabajan los bíceps, la zona media, la espalda y las piernas. Es una práctica completa, con la que se puede lograr un resultado equilibrado para moldear nuestra figura de manera armónica.
Trabajar con nuestro peso corporal nos permite aumentar nuestra fuerza y resistencia muscular y tonificar todo el cuerpo. Por si esto fuese poco, siempre es posible utilizar muñequeras o tobilleras con peso para aumentar la dificultad, según cada persona.
Entre los beneficios que el TRX aporta a nuestro cuerpo, podemos mencionar los siguientes:
-Proporciona una buena figura.
-Genera resistencia.
-Quema calorías.
-Mejora la coordinación, la flexibilidad y la movilidad.
-Elimina los dolores de espalda.
-Trabaja los abdominales, músculos del pecho, glúteos y lumbares.
-Ayuda a mejorar la postura corporal.
-Trabaja todo el cuerpo en un mínimo espacio.
-Fortalece el corazón.
-Reduce el perímetro abdominal y previene lesiones.
El TRX es una práctica de origen militar. Viene del entrenamiento con las cintas de paracaídas y las cuerdas que usaban los militares cuando iban a la batalla. Tenían que buscar la manera de entrenar y lo hacían con las cuerdas en suspensión. Así desarrollaron un sistema más efectivo, que incluso es mucho más completo que el levantamiento de pesas tradicional, mejorando la coordinación, la flexibilidad y la movilidad.
