Qué es alfarería

Fecha de publicación: 07-08-2018

La palabra alfarería proviene del árabe, concretamente de los vocablos al-fahhar que pueden traducirse como la cerámica..

La alfarería es el nombre del arte que consiste en la elaboración de vasijas de barro cocido. También reciben dicho nombre las tiendas donde se comercializan las vasijas y el obrador en el cual se fabrican.

Por lo general, el concepto de alfarería se utiliza para hacer referencia a aquellas piezas realizadas sin esmalte o con barniz aplicado en una única cocción. Por eso, el alfarero se diferencia del ceramista, ya que este añade esmaltes y utiliza diversas técnicas en sus piezas, con más de una cocción.

Los historiadores afirman que la alfarería nace hace unos 12.000 años en Japón, con el desarrollo de la cerámica Jomon. La alfarería más antigua de América Latina de la cual se tenga registro está compuesta por los objetos de Kotosh-Hauyrajirca, que fueron encontrados en Perú y cuya data se ubica en el año 1.850. a.C.

De igual manera, hoy tenemos el privilegio de poder admirar desde piezas egipcias del año 3.700 a.C. hasta otras pertenecientes a las culturas que poblaron la Península Ibérica durante la edad del Bronce pasando por cerámicas griegas, iberas o romanas.

Precisamente estas y otras más, se han convertido en las mejores obras de arte y joyas que se conservan en los más exclusivos museos de todo el mundo. En concreto, algunas de las más significativas se hallan en el Museo Arqueológico Nacional de Atenas, el Museo Nacional de Tokio, el Museo Nacional de Arte Antiguo de Portugal o el Museo Arqueológico Nacional de España en la ciudad de Madrid.

Todo ello sin olvidar tampoco que, por ejemplo, existen otros centros culturales de este tipo que están especializados en la alfarería. Este es el caso del Museo de Alfarería de Agost, en la comunidad valenciana, que se encuentra situado en una antigua fábrica de barro del siglo XIX y que permite conocer a fondo las características de este arte en dicha zona.

En cuanto al proceso de elaboración de las piezas de cerámicas, se inicia con el amasado de la arcilla, para que las distintas partículas y la humedad se distribuyan de manera homogénea y para evitar la formación de burbujas de aire.

El siguiente paso consiste en el moldeado manual o con la ayuda de distintas herramientas. En esta parte del proceso se agrega agua, de manera que la arcilla mantenga su plasticidad y no surjan rajaduras.

Después, la pieza es dejada al aire libre para que se seque, en una fase conocida como estado de cuero. Cuando la pieza está totalmente seca, adquiere mayor dureza y un color más claro. El alfarero puede entonces lijar la pieza para dejarla con un mejor acabado.

Finalmente, la pieza de alfarería es llevada al horno, donde adquiere mayor resistencia y pierde su humedad química.