Fecha de publicación: 21-07-2016
Al contrario de los que muchos creen, las pastas son un buen alimento, de un alto aporte nutricional y un elemento fundamental para una dieta equilibrada. Este alimento contiene hidratos de carbono complejos que aportan energía de forma gradual, algo especial para deportistas que tienen un alto desgaste físico.
Las pastas de trigo duro contienen un alto porcentaje de gluten y celulosa que ayudan a saciar el apetito e induce a comer menos cantidad. Por su composición ayudan a una buena digestión. Este es un beneficio saludable porque las comidas con carbohidratos de lenta digestión ayudan al cuerpo a obtener todos los beneficios nutricionales necesarios.
A su vez por tener ingredientes que se digieren fácilmente son recomendables para las personas que tienen problemas de úlceras estomacales o gastritis.
La ensalada de pasta fría es una deliciosa pasta que se puede servir como entrada o acompañante de cualquier carne. Se puede comer al instante de prepararla, esto de o después de mucho rato y sigue igual de deliciosa.
Se prepara con 3 bolsas de pasta regulares de tornillo, 2 latas de aceitunas, una verde y otra negras, las dos rellenas, 3 pepinos lavados con cáscara, 3 zanahorias grandes peladas y ralladas en láminas (con el mismo pelador), 3 pimientos verdes en cubos sin semillas, 500 gramos de queso manchego en cubitos, aceite de oliva, 1 cebolla limpia y 1 tomate rojo pero firme lavado.
Poner a calentar en un recipiente 5 litros de agua y agregar una taza de aceite vegetal, y luego poner la pasta. Sin dejar de mover para que se cocine pareja, por 12 a 14 minutos. Se escurre y reserva.
Los pepinos se lavan muy bien y se les retiran las semillas. Ya limpios, se pican en cubitos. Las zanahorias lavadas y sin piel se preparan en láminas o cubitos. Las aceitunas negras y se escurren se parten por mitad o se dejan enteras. El queso manchego, la cebolla y el tomate se parten en cubitos y también se reservan.
Revolver en un recipiente grande primero la pasta, luego aceite de oliva, pepino, zanahoria, aceitunas, tomate, cebolla y sal al gusto. Se puede convertir en una comida completa si se le ponen cubos de jamón o de pechuga de pollo.
Otra alternativa es la ensalada de pasta y vegetales, que se prepara con 220 gramos de pasta corta, 1/4 de taza de agua fría, 3 cucharadas de aceite de oliva o vegetal, 1 cucharada de vinagre, 2 tazas de brócoli fresco, 1/4 de taza de cebolla roja en julianas, 1 pimentón verde troceado y 1 pimentón rojo troceado, sal y pimienta, lajas de cebolla largas, hojas de apio, y ajo triturado.
Hervir agua y añadir la pasta, aceite, sal y pimienta, trozos de cebolla, ajo triturado, hojas de apio, dejar cocer hasta que esté al dente. Colar y reservar con un poco de aceite para que no se pegue.
En vaporera, cocer los vegetales, salpimentar. Las dos preparaciones se reservan en la nevera por 1 hora. Antes de servir se mezclan. En un bol disolver agua, aceite y vinagre. Adicionamos a la ensalada.
Una ensalada de pasta fría con camarones puede ser una propuesta inesperada para muchos. Lleva 2 1/2 tazas de pasta de coditos, 1 taza de yogurt natural, 2 cucharadas de mostaza pura, 2 cucharadas de sazonador sin sal, 1 1/2 tazas de apio finamente picado, 1 taza de cebollitas rebanadas en rodajas, ½ kilo de camarones pequeños cocidos y 3 tazas de tomate picado finamente.
La pasta se cuece en agua sin sal con poco aceite, una hoja de laurel y un trocito de cebolla el tiempo necesario, se escurre y se deja enfriar. En un bol se mezcla el yogurt, la mostaza y el sazonador, se le añade la pasta y la cebolla, se mezcla y se refrigera por 2 horas. Antes de servir se combinan cuidadosamente los camarones y el tomate.