Vida y obra de Francisco Narváez

Fecha de publicación: 26-09-2017

La escultura venezolana del siglo XX quedó marcada por la obra de Narváez.

Francisco Narváez  fue un sobresaliente escultor venezolano. Nació en Porlamar, isla de Margarita, 4 de octubre de 1905. Fue hijo del ebanista y restaurador José Lorenzo Narváez y de Vicenta Emilia Rivera.

Se trasladó aún adolescente a Caracas, donde comenzó a estudiar en la Academia de Bellas Artes. En 1928 viajó París, donde estableció lazos con el movimiento de Montparnasse, del cual le influenciaron poderosamente Modigliani, Raoul Dufy y Moisés Kisling. Regresó a Venezuela en 1931.

Comenzó a trabajar junto al arquitecto Carlos Raúl Villanueva, quien situó su obra en la fuente de Parque Carabobo, en los relieves de las fachadas de los museos de Bellas Artes y Ciencias Naturales, y el grupo de piezas para la fuente de la Plaza O'Leary, en El Silencio, conocida como "Las Toninas"; todas ellas en la ciudad de Caracas.

En 1939, viajó a Nueva York para decorar el pabellón de Venezuela en la Feria Mundial. En 1948, obtuvo el Premio Nacional de Pintura en el Salón IX Oficial de Arte Venezolano. En 1954, representó a Venezuela en la Bienal de Venecia, Italia.

Entre sus numerosas obras, es imprescindible mencionar la estatua ecuestre del General Rafael Urdaneta; así como varias piezas para la Ciudad Universitaria de Caracas, que el afamado arquitecto concibió como una "síntesis de las artes”.

La obra de Narváez se caracteriza por un componente étnico, con reminiscencias negroides e indígenas, en el que los volúmenes tienen la voluptuosidad y la cadencia del trópico.

Luego de su muerte, ocurrida en Caracas el 7 de julio de 1982, se crea la Fundación Francisco Narváez, donde hoy funciona el Museo Francisco Narváez Caracas.