Fecha de publicación: 11-01-2018
Si bien es cierto que la energía eólica se ha convertido en una fuente de energía alterna renovable y de bajo impacto en el medio ambiente, en virtud de que no genera contaminación, tiene sus características y particularidades que deben analizarse antes de plantearse su implementación. Veamos a continuación, cuáles son algunas de esas características.
Debido a la falta de seguridad en la existencia de viento, la energía eólica no puede ser utilizada como única fuente de energía eléctrica.
Este problema podría solucionarse mediante dispositivos de almacenamiento de energía eléctrica, pero hasta el momento no existen sistemas lo suficientemente grandes como para almacenar cantidades considerables de energía de forma eficiente. Por lo tanto, para enfrentar la discontinuidad en la producción de energía eólica y evitar apagones generalizados, es indispensable un respaldo o complemento de las energías convencionales como centrales termoeléctricas de carbón, gas natural o derivados del petróleo por solo nombrar algunos.
Otro de los aspectos que debe considerarse es el hecho de que para distribuir la electricidad producida por cada parque eólico (que suelen estar situados además en parajes naturales apartados) es necesario construir unas líneas de alta tensión que sean capaces de conducir el máximo de electricidad que sea capaz de producir la instalación, lo que supone una considerable inversión de recursos financieros y un considerable tiempo de ejecución.
Además de la evidente necesidad de una velocidad mínima en el viento para poder mover las aspas, existe también una limitación superior: una máquina puede estar generando al máximo de su potencia, pero si la velocidad del viento sobrepasa las especificaciones del aerogenerador, es obligatorio desconectarlo de la red o cambiar la inclinación de las aspas para que dejen de girar, puesto que su estructura puede averiada por los esfuerzos que ejercen el eje.
La consecuencia inmediata es un descenso evidente de la producción eléctrica, a pesar de haber viento en abundancia y supone otro factor más de incertidumbre a la hora de contar con esta alternativa energética en la red eléctrica de consumo.
Generalmente, aunque no siempre, los parques eólicos se combinan con centrales térmicas, lo que lleva a algunas personas a considerar que realmente no ahorran emisiones de dióxido de carbono. No obstante, hay que tener en cuenta que ningún tipo de energía renovable permite, al menos por sí sola, cubrir toda la demanda y producción de electricidad, sin embargo, su aporte a la red eléctrica es netamente positivo desde el punto de vista del ahorro de emisiones.
El impacto paisajístico es un tema importante debido a la disposición de los elementos horizontales que lo componen y la aparición de un elemento vertical como es el aerogenerador. Producen el llamado «efecto discoteca»: este aparece cuando el sol está por detrás de los molinos y las sombras de las aspas se proyectan con regularidad sobre los jardines y las ventanas en forma de parpadeo. Este aspecto, unido al ruido, puede llevar a la gente hasta un alto nivel de estrés, con efectos de consideración para la salud. No obstante, la mejora del diseño de los aerogeneradores ha permitido ir reduciendo progresivamente el ruido que producen.
También ha de tenerse especial cuidado a la hora de seleccionar un parque si en las inmediaciones habitan aves, por el riesgo de mortandad que implicaría el impacto con las palas, aunque existen soluciones al respecto como pintar en colores llamativos las palas, situar los molinos adecuadamente dejando "pasillos" a las aves e incluso, en casos extremos, hacer un seguimiento de las aves por radar llegando a parar las turbinas para evitar las colisiones.
Al ser el aire fluido implica producir molinos de gran envergadura, eso conlleva la necesidad de mayor terreno para la construcción y un mayor costo de construcción.
La apertura de parques eólicos y la presencia de operarios en ellos, hacen que el elemento humano sea constante en lugares hasta entonces poco transitados, lo que afecta también a la fauna.
Estudiar el comportamiento de los vientos en la zona donde se vislumbre construir un parque eólico, el impacto medio-ambiental que podría generar respecto al ecosistema donde se tenga pensado ubicarlo, además de la búsqueda de otras fuentes de energía alterna, son elementos que se deben considerar al querer aprovechar la energía que genera el movimiento de los vientos.
