¿Qué tipo de animales se puede considerar de compañía?

Las mascotas o animales domésticos son los más convenientes para tener en casa como compañía pues, después de muchos años de evolución se han adaptado en gran medida a la vida en los centros urbanos y a los hábitos cotidianos del hombre, dejando de ser un riesgo para los seres humanos.

La compenetración de las personas con sus mascotas es de tal magnitud, que en la mayoría de los casos estos animalitos son criados con mucho amor, tratándolos como otro integrante de la familia, con sus cuidados particulares en alimentación y salud, además del cariño y las atenciones que por demás se merecen, si tomamos en cuenta el valioso aporte que nos brindan con sus ocurrencias, travesuras y grata compañía.

Los animales domésticos más populares alrededor del mundo son los gatos, en cualquier variedad de la especie. Según algunos estudios, para el año 2006 había al menos 202 millones de gatos como animales de compañía en todo el mundo. Desde la domesticación del gato hacia el año 7.500 a.C., los mininos han ganado popularidad debido a su capacidad de adaptación tanto a la vida urbana, como a las zonas rurales.

Con una variedad de razas que supera las 200 diferentes, los perros son muy aceptados como animales de compañía en todo el mundo por ser leales y cariñosos. Los canes han sido fieles compañeros del hombre durante milenios. Se desempeñan como tutores, acompañantes, trabajadores y ayudantes, con facilidad para crear buenos hábitos si se les brinda el debido y oportuno entrenamiento.

En otro rango de preferencias, existen variedades de animales de compañía que se pueden criar en nuestros hogares sin muchos inconvenientes, solo con acondicionar un lugar adecuado para ello y la atención requerida. De esta manera tenemos peces, pequeños mamíferos como conejos y hámster, anfibios como las tortugas y del reino de las aves, los canarios y periquitos.

Las especies que no se deben considerar como animales de compañía, son aquellas provenientes de la fauna silvestre, en primer lugar porque su origen generalmente se deriva de procedimientos ilícitos como el contrabando o el tráfico de especies, razón por la cual, estos ejemplares no cuentan con los requerimientos sanitarios que exige la ley y son agentes potenciales de contagio de virus y otras enfermedades perjudiciales para los seres humanos.

Pero la razón fundamental por la cual no son recomendables como mascotas, es el hecho de ser silvestres y al ser sacados de manera violenta e inadecuada de su hábitat, difícilmente podrán adaptarse al modo de vida de sus dueños, evidenciando agresividad y una conducta que difiere mucho de los animales domésticos, convirtiéndose en un riesgo potencial para quienes los poseen, familiares, vecinos y el resto de la comunidad.

Serpientes, monos, cunaguaros, osos y mapaches, si bien pueden despertar nuestra curiosidad y la de quienes nos rodean, no son recomendables como animales de compañía, pues están habituados a la vida silvestre y la mayoría de ellos en peligro de extinción.