Fecha de publicación: 02-07-2018
La Subasta Electrónica consiste en un proceso dinámico de negociación de precios online entre proveedores preseleccionados, con el propósito de obtener una parte del negocio.
Se trata de un sistema de negociación en el cual, de cierta manera, desaparece la relación directa y personal con el cliente, para trasladar la negociación bajo el ambiente web. En contraposición al enfoque de la subasta tradicional, en la subasta electrónica gana el lote el que menor precio oferte.
Las subastas electrónicas han registrado un marcado crecimiento y ello ha quedado en evidencia al revisar los ámbitos productivos que han adoptado esta metodología para la realización de sus negociaciones, tal es el caso del sector automotriz, el sector energético, el aeroespacial, el área de las contrataciones públicas, entre otros.
De manera sintetizada, el proceso de subasta electrónica se inicia con la preparación de los lotes. En esta etapa el cliente solicita a sus proveedores habituales un informe completo sobre los productos suministrados que incluye, entre otros elementos, el precio, condiciones de entrega y especificaciones técnicas.
Luego, el cliente preselecciona a los participantes usando criterios como: proveedores conocidos, proveedores importantes en su cartera o en función de una base de datos que en muchos de los casos, es proporcionado por el propio operador de internet; por último, nuevos proveedores. También se consideran aspectos como fechas del proceso de negociación, condiciones del contrato y aceptación del proceso de cotización.
El siguiente paso consiste en solicitar vía correo electrónico, información a los ofertantes en todo lo referente a nombre, dirección fiscal, contactos, datos financieros, comerciales, de productividad y también, aquellos relacionados con controles de calidad en sus procesos.
En cuanto a la solicitud de precios, el comprador envía a los ofertantes, una guía con las referencias a cotizar para cada lote, entre las cuales se encuentran el costo de la materia prima, el costo de transformación, el costo asociado al transporte, el margen de ganancia y el precio final.
Lo relacionado con el proceso de subasta en sí, tenemos que el cliente envía una comunicación a los proveedores seleccionados que incluye información sobre la fecha, portal de compra, condiciones de la subasta teléfonos de contacto, además del envío personalizado de nombre y contraseña para participar en la negociación. Generalmente, el proveedor de internet ofrece un curso online sobre la forma de cotizar en la subasta y de forma complementaria, se realizan simulaciones de la negociación real.
El último paso corresponde a la adjudicación y es en esta fase cuando se difunde la decisión del participante ganador para cada lote; finalmente se procede con la formalización del contrato.
Entre las ventajas de las subastas electrónicas figuran las siguientes:
-Expansión del escenario para la participación de potenciales proveedores, ya que puede invitar a proveedores alejados geográficamente.
-Ayuda al cliente a encontrar el mejor precio de mercado de sus productos.
-Reduce el tiempo de negociación en un 50%.
-Las empresas obtienen un retorno sobre la inversión realizada en una proporción de 10 a 1.
-El 80% de los proveedores acusan una disminución de precios como resultado de las subastas.
-Despersonaliza la oferta, aspecto que evita posibles tratos favorecedores entre el comprador local y el proveedor habitual.
-Reducen el margen de error en la formulación de ofertas.