Cómo pulir un piso de cemento

El cemento es una mezcla de caliza y arcilla calcinadas y molidas, que tiene la propiedad de endurecerse con el agua. Se aplica en obra y se alisa de forma manual o mecánica. .

En muchos casos se utiliza para decorar espacios, este tipo de cemento recibe el nombre de cemento pulido, la cual es una técnica que se utiliza para darle un mejor aspecto a la obra. Se trata un tipo de pavimento con continuidad sobre una superficie auto nivelada, dando como resultado un suelo uniforme y continuo. Para alcanzar esta técnica, los pasos son los siguientes:

Cómo pulir un piso de cemento

1.       Se hace una mezcla de cemento, piedra partida, arena y agua.

2.       Se vierte el hormigón sobre el piso o el espacio que se desee.

3.       Chequear que tenga un espesor de al menos 5 cm y que no se hagan paños de más de 6 metros cuadrados para evitar la formación de rajaduras e imperfecciones.

4.       Entre cada paño se debe dejar una junta de dilatación que puede ser de madera, cerámica, metal o algún otro material.

5.       Se inicia el proceso de nivelado distribuyendo la mezcla de forma uniforme con un secador de goma.

6.       Se alisa con un listón de madera con sus lados lisos.

7.       Cuando se obtiene la uniformidad deseada, se pasa una esponja o un rodillo.

8.       Finalmente se eliminan las imperfecciones con una llana manual.

El error más frecuente en un piso de cemento pulido son las grietas, las cuales aparecen cuando la mezcla no se preparó en las proporciones adecuadas o se hicieron paños demasiado grandes. Lo recomendable es que no superen los 4 o 6 metros cuadrados.

Otro problema suelen ser las manchas desagradables por el resultado de la mala integración entre los pigmentos y el hormigón. Otro tip importante es que si el hormigón no se cura una vez terminado y seco, puede mancharse con facilidad. Por lo que lo recomendable es esperar unos minutos.

Sin embargo, es el favorito por los decoradores por ser apropiado para los hogares y las obras en general. Por lo que es una buena opción para espacios grandes como comercios, estacionamientos, depósitos, hospitales y escuelas. Entre otra de sus ventajas está que es un trabajo que se puede hacer con sus propias manos ya que es fácil de aplicar porque no hay que aprender de terceros. De igual forma, se debe tener paciencia para darle un buen acabado, esperar el tiempo de fraguado y curar el piso una vez terminado.