Tipos de acuicultura en Venezuela

Fecha de publicación: 12-03-2015

La acuicultura en Venezuela representa una gran oportunidad para la diversificación de nuestras actividades productivas..

Si se quiere, la acuicultura constituye una actividad relativamente reciente en nuestro país. Aunque en el año 1937 se registran antecedentes de su práctica, no es sino hasta 1970 cuando se trabaja en cultivos en forma experimental y a escala piloto, inclusive, desarrollándose algunos a nivel comercial.

En la actualidad, Venezuela está considerada como uno de los países con mayor potencial de desarrollo en esta práctica agroeconómica como consecuencia de su excelente clima, la topografía y los recursos hídricos y energéticos.

Además de ello, poseemos una generosa costa de casi 3 mil kilómetros hacia el Mar Caribe y el Océano Atlántico y 70 millones de hectáreas de reservorios de agua dulce; más de 6 mil kilómetros cuadrados de lagunas y 560 mil hectáreas de ríos.

En el país, destacan las siguientes crías de especies:

La “Cachamicultura”, o cría de la Cachama, manejada por pequeños y medianos productores pero bien organizados, incluso con experiencias de comercialización positivas, en virtud de que los costos de producción son relativamente bajos, lo que se traduce en un precio accesible al consumidor.

La “Tilapiacultura” (cría de la Tilapia) es desarrollada por productores medianos con mayor nivel de conocimientos y recursos económicos. El producto tiene un mayor alcance en el mercado, llegando a comercializarse en supermercados e hipermercados.

La “Truchicultura” o cultivo de la Trucha, goza de gran aceptación, sobre todo en la región andina, en virtud del clima frío típico de la zona, muy favorecedor para la cría de esta especie. Se han registrado experiencias exitosas en cuanto a su comercialización.

Otros especímenes que se están cultivando en el país son el bagre, el pavón que por su hermoso colorido es muy cotizado en el desarrollo de la pesca deportiva y recreativa y finalmente, algunas especies ornamentales.

La articulación de políticas gubernamentales que estimulen el desarrollo sustentable de esta actividad y el fortalecimiento de los entes de investigación en el área, serían factores importantes para impulsar el crecimiento de la acuicultura en Venezuela.