Cómo comer las 12 uvas de Año Nuevo

Fecha de publicación: 28-12-2015

Uvas, vieja costumbre para recibir el año nuevo con entusiasmo, los mejores deseos y unidos en familia .

Según la vieja tradición, se cree que aquel que coma las doce uvas al compás de las campanadas tendrá un año próspero. Poco a poco, la costumbre de comer las doce uvas en la espera de los primeros instantes de año nuevo se fue popularizando y hoy por hoy, en muchas partes del mundo se cultiva este hábito.

Tal es el arraigo de esta tradición que, en muchos automercados y establecimientos comerciales venden las bandejas con las doce uvas, peladas e incluso sin semillas, listas para ser llevadas a la boca en el último respiro del año. Pero echemos atrás y veamos los antecedentes que marcan el inicio de esta popular costumbre.

La tradición de las doce uvas de la suerte se remonta a la década de 1800. Sin embargo, se hizo más frecuente en 1895, cuando los productores de uvas tenían una enorme cosecha en la zona de Alicante, en España. Los productores de la zona propusieron la promoción de 12 uvas de la fortuna con el fin de ayudar a vender la gran cantidad de uvas. Promovieron la idea de Año Nuevo y la tradición se ha llevado a cabo a través de los años.

En esos momentos, las familias que estaban acomodadas, a menudo comían uvas y bebían champán para celebrar el Año Nuevo. En un esfuerzo por ridiculizar a esta tradición “snob”, un grupo de la clase obrera madrileña se reunió en la Puerta del Sol de la capital española para comer las uvas y disfrutar de su champán; esto es lo que llevó a las celebraciones que ahora presenciamos cada año.

En la Puerta Plaza del Sol de Madrid, miles de personas, en su mayoría grupos familiares y amigos se dirigen a esta plaza en el centro de la capital española cada 31 de diciembre para celebrar la llegada del Año Nuevo. Después de la tradicional toma de las uvas, la felicidad y la emoción se apoderan del lugar, que se convierte en una gran concentración invadida por el papelillo, la serpentina y la música.

Con respecto al encanto que tiene esta tradición, se dice que comer las 12 uvas dentro de los 12 segundos antes del año nuevo, traerá buena suerte durante todo el año entrante. Otras personas piden deseos mientras las toman, uno por cada uva que ingieren durante las campanadas.

Sobre cómo hay que tomarlas, existen diferentes versiones de las formas y métodos a utilizar. Una de ellas es que simplemente son el símbolo de las 12 campanadas del reloj que nos llevan al día siguiente, mientras que otras hablan de que cada uva representa un mes del año.

Otra versión nos dice, que con cada uva que se coma, debemos pedir un deseo, 12 uvas, 12 deseos. Así que, si conseguimos comerlas todas, nuestros deseos se cumplirán.

La tradición se originó en España y ha sido adoptada por muchos países de América Latina para las celebraciones propias de la víspera de Año Nuevo. Y aunque suene sencillo, tratar de comer 12 uvas en 12 segundos tiene su técnica. El tiempo es crucial y debe coincidir con los últimos 12 segundos del año.

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