Playa Punta Arenas, un paraíso hecho para vivirlo

Punta Arenas está ubicada en el extremo oeste de Margarita, lo que la hace la playa más occidental de la isla.

Luego de ser asaltada por piratas en el año 1593, quedó desolada y abandonada hasta 1894 cuando pescadores de Punta de Piedras arribaron a la zona y bautizaron un sector de la playa como La Gloria.

La playa Punta Arenas está ubicada en el extremo oeste de la Isla de Margarita, lo que la hace la playa más occidental de la Isla de Margarita. Está conformada por dos líneas costeras en forma de punta triangular, de aguas cristalinas poco profundas y arenas blancas.    

Punta Arenas es una playa paradisíaca. Si bien la temperatura del agua es un poco fría y la playa tiene algo de oleaje, su arena es incomparable. En esta playa vale la pena esperar el majestuoso atardecer.

El pueblo, conocido con el mismo nombre que la playa, está poblado exclusivamente por pescadores artesanales que viven de la producción que les ofrece la pesca. En tiempos pasados esta playa era muy desolada, sin embargo, en la actualidad es muy concurrida por aquellos turistas que se atreven a aventurar en Margarita.

Todos los días se pueden ver turistas aventureros que se pasean en rústicos alquilados o en la excursión del Jeep Safari.  La playa está dividida en dos zonas de distintas características que están separadas por una impresionante punta arenosa. 

La primera zona, es la que se ve al entrar al pueblo de Punta Arenas. Apenas se entra se ven los barcos y botes de pesca que le dan un característico toque de vida local. La vista que se genera permite disfrutar lo largo de la extensión de la playa, incluyendo las rancherías y churuatas de pescadores. En esa extensión se encuentra una amplia oferta de restaurantes locales que sirven comida, tragos a la orilla del mar y también alquilan sillas y toldos.  Los pescadores locales ofrecen paseos en bote y también se pueden encontrar servicios de deportes acuáticos como paseos en banana.

La otra zona, es la que está ubicada al final, pasando la extensión de restaurantes que se prolongan a lo largo de la playa. En ese extremo se encuentra una punta arenosa, esa punta, es la que origina el nombre a la playa de Punta Arenas. Si se va en vehículo, al final de esa prolongación, se va bordeando a la laguna de Punta Arenas hasta encontrar una entrada arenosa que lleva a la orilla del otro lado. En esta parte de la playa existe un estacionamiento no pavimentado y es el lugar de llegada de los Jeep Safari.

Esta zona cuenta con restaurantes que disponen de toldos con capacidad doble y hasta familiares, los cuales se alquilan con sillas de extensión. Incluso se pueden arrendar mesas y sillas cuando se quiere planear una gran reunión familiar.

También permiten llevar cava y si se apetece de pescado fresco como el Pargo, Sierra o Mero, lo venden por kilo. Algunas veces se ven langostas para el almuerzo pero lo más frecuente son los calamares rebosados.

Punta Arenas es una playa muy concurrida los fines de semana y los días festivos. Generalmente no cuenta con vigilancia, a excepción de los días de mayor concurrencia. Aunque no posee mucha sombra natural, dispone del servicio de sombrillas para resguardar del sol  a sus visitantes.