Origen de los viveros, ¿Qué podemos encontrar en ellos?

Fecha de publicación: 18-03-2015

El vivero garantiza la vida de especies vegetales ornamentales, frutales e incluso aquellas destinadas a proveer de madera..

El vivero garantiza la vida de especies vegetales ornamentales, frutales e incluso aquellas destinadas a proveer de madera.

Hacia el año de 1875 surgieron los viveros forestales en América, específicamente en Argentina, de la mano de inmigrantes de varias partes del mundo, principalmente españoles, italianos, portugueses, alemanes y belgas, quienes ya tenían una amplia experiencia en las labores de cultivo de plantas.

Para toda especie vegetal cuyo origen sea bien por semilla o por un segmento de tejido que se reproduzca en la tierra, sus primeros días son muy críticos para la supervivencia, por ello se crearon los viveros como un lugar que, bajo un ambiente controlado, permite garantizar el desarrollo de un mayor número de plantas desde sus primeros días de vida.

Tomando en cuenta estos elementos, podemos definir a un vivero como una instalación diseñada de forma tal que pueda garantizar la vida de determinados tipos vegetales, constituyéndose en el medio para producir, seleccionar y expandir en gran número, especies útiles para el hombre.

Para que cumpla con este importante objetivo, deben prevalecer ciertos criterios a la hora de su construcción, entre los cuales destacan el tipo de especies que se quieren cultivar, las cuales deben ser cónsonas con el clima donde esté ubicado el vivero.

En virtud de que las plantas jóvenes están en pleno crecimiento, se necesita un buen sistema de riego que garantice su hidratación, de lo contrario podrían morir por marchitamiento.

Es importante además, tener una noción de las características climáticas de la zona donde se establezca el vivero puesto que un clima adverso, no garantiza la supervivencia de las plantas. Por esta razón, deben tomarse en cuenta los períodos de lluvia y sequía por ejemplo, determinantes en actividades como la siembra, trasplante y poda.

El ambiente cerrado y controlado de estas instalaciones, tiene otro aspecto importante que es la prevención de la acción depredadora de ciertos animales que podrían atentar contra la vida de las plantas en su etapa inicial.

Además de la característica tela metálica que con frecuencia rodea y le da forma a los viveros, en ellos podemos encontrar diversas instalaciones dependiendo de su tamaño y características, pero las más comunes son los semilleros, áreas de envasado, platabandas o estructuras que protegen a algunas especies vegetales de la acción directa del sol, así como instalaciones hidráulicas que conforman el sistema de riego.

La creciente demanda de madera para ser utilizada en la industria, dio origen a la necesidad de crear los viveros forestales para mantener un alto volumen de especies vegetales para su proliferación. Con el paso de los años, se diversificó la actividad hasta abarcar especies frutales y ornamentales.