Juan Griego, la majestuosidad del atardecer en Margarita

Fecha de publicación: 12-07-2018

Presenciar la caída del sol en Juan Griego, es todo un espectáculo que estremecerá nuestros sentidos.

La bahía de Juan Griego ubicada en la isla de Margarita, debe su nombre a un marino griego cuyo nombre era Juan y que fue abandonado por los piratas en una zona de la costa margariteña. Posteriormente, este  hombre se estableció en el lugar. Con el tiempo, se identificó como Juan Griego a la bahía y a la población que allí creció.

Juan Griego tiene el privilegio de poseer esta hermosa bahía de aguas tranquilas y una población que se ha ido dispersando principalmente hacia tierra adentro, en la vía hacia La Asunción. Los margariteños de Juan Griego sintetizan la calidad de su gente pues son personas cálidas, amables y excelentes anfitrionas para quienes visitan esta región.

La principal atracción de Juan Griego es el Fortín que data de la época de la colonización. Desde allí se tiene una espectacular e increíble vista hacia la ciudad y a la playa de La Galera. En particular es muy concurrida por decenas de turistas que a diario se acercan al lugar para disfrutar de la caída de la tarde y el inicio del anochecer.

Los hermosos atardeceres en la bahía de Juan Griego, constituyen uno de los mágicos atractivos que nos ofrece la isla de Margarita. El crepúsculo es inigualable, con un impresionante colorido de tonos amarillos, anaranjados y rojos.

Ya sea desde el Fortín de “La Galera” o en la playa de La Bahía, este espectáculo puede ser presenciado por los visitantes que a diario acuden a fotografiar el crepúsculo más romántico de la llamada Perla del Caribe y es que, después de tantos y tantos años, esta singular atracción de la naturaleza, continúa cautivando a propios y extraños.

A los espectadores les encanta esperar minuto a minuto la caída del sol. Para la mayoría, el objetivo es captar una imagen perfecta de este indescriptible efecto natural bien sea a nivel de fotografía o video. Lo importante es presenciar y llevarse un recuerdo único y exclusivo de este atardecer difícil de presenciar en otro lugar.

Y mientras se aguarda a que el sol desaparezca en el horizonte, quienes visiten la bahía podrán encontrar artesanos que expenden sus obras y prendas que bien vale la pena atesorar como recuerdos de la visita a Margarita. También se puede acompañar el momento probando la variedad de exquisitos dulces, que le darán gusto al paladar tanto de grandes como de chicos.

Finalmente y para resumir el encantamiento de muchos turistas, más que verlo, el atardecer en Juan Griego, hay que vivirlo.

La bahía de Juan Griego está muy bien resguardada de los vientos y sirve de refugio a los botes de pescadores que se anclan en las aguas tranquilas de su mar. Este es, sin lugar a dudas, el marco perfecto para presenciar la puesta de sol más hermosa, momento especial para compartirlo en familia o con los amigos.