7 ideas creativas para ahorrar energía eléctrica en las escuelas

Fecha de publicación: 26-05-2016

Tanto maestros, representantes y alumnos deben involucrarse con las medidas de ahorro energético en la escuela.

En la comunidad escolar tanto docentes como alumnos pasan buena parte del día, por lo tanto, son muchas las oportunidades de llevar a cabo, prácticas destinadas al ahorro de energía que reportarán grandes beneficios, tanto ambientales como económicos.

1.- Apagar las luces de los salones de clases, cantina, oficinas administrativas, auditorios, salas de usos múltiples o cualquier otra área, cuando no se necesiten.

2.- Estimular entre los alumnos, foros, debates, lluvia de ideas y talleres de donde se generen pancartas, carteleras y folletos con mensajes de ahorro energético especialmente diseñados para ser aplicados en la escuela.

3.- Con el consenso y colaboración de la comunidad educativa, instalar lámparas fluorescentes compactas, que utilicen bombillos ahorradores o tecnología LED.

4.- En las salas de computación, los estudiantes deben apagar los monitores que no se vayan a utilizar para el siguiente período de clases. Asimismo, al final del día y durante los fines de semana, todos los computadores deben estar apagados.

5.- Formar grupos de ahorro energético que pueden rotarse semanalmente para que todos participen, ¿Su objetivo? asegurarse de que las computadoras, fotocopiadoras, impresoras y demás equipos que consuman electricidad permanezcan apagados cuando no estén en uso, garantizando también que queden totalmente desactivados al final de cada día.

6.- Aprovechar la energía que brinda la naturaleza, dejando que los rayos solares pasen a través de las ventanas hacia los salones de clase, para reducir la cantidad de lámparas encendidas.

7.-Evitar que la energía se filtre por las ventanas: Cuando en los salones se utilice bien sea la calefacción en época de frío o el aire acondicionado en los períodos calurosos del año, las ventanas deben estar cerradas, de lo contrario, se desperdiciará una gran cantidad de energía.

La adquisición de equipos de computación con certificación de bajo consumo energético, podrían resultar más costosos, sin embargo, a mediano y largo plazo permitirían al colegio ahorrar dinero, porque reducen sensiblemente los costos de facturación por concepto del servicio eléctrico.